San Sebastián fue un centurión romano martirizado por no renunciar a la fe cristiana. Tras sobrevivir a un primer martirio, en el que fue sostenido a un poste y lanzaron sobre él una lluvia de flechas, dándolo por muerto, volvió a interpelar al emperador,
quien decretó su apaleamiento.
Tras ser arrojado a una cloaca, se apareció en sueños a Santa Lucina para señalar dónde se hallaba su cuerpo. Es uno de los más importantes protectores contra la peste en la Edad Media. Su martirio se convirtió en excelente excusa para el estudio de la anatomía masculina durante el siglo XV.
Galo Conesa nos presenta esta original obra, donde se representa el martirio de San Sebastián. Con destino Horcajo de Santiago (Cuenca). Realizada en madera policromada, y sus medidas son las siguientes: 1’80x50x50.
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Maravilloso,no hay palabras para describirlo,